Entre la colonia Doctores al este y el bosque de Chapultepec al oeste, la Colonia Roma de la delegación Cuauhtémoc es una de las más famosas de Ciudad de México. La Roma fue construida como barrio a partir de principios del siglo XX, fruto de la necesidad de una clase alta de intelectuales y profesionales de oficios liberales. En la Roma el cineasta Luis Buñuel encontró escenarios que inmortalizó en su película Los Olvidados.
Historia de la Colonia Roma
La historia de esta Colonia como tal comienza con el inicio del siglo XX, pero en realidad muchos desconocen que aquí se ubicaba la isla de Aztacalco (cuyo nombre en náhuatl significa “en la casa de las garzas»), que como Tenochtitlán emergía de las aguas del inmenso lago. Cuando los españoles llegaron un gran número de indígenas acudieron a vivir aquí como una especie de reserva. En el siglo XVIII aparecen las primeras menciones de Aztacalco como la Romita, en alusión al parecido de un paseo arbolado que se dirigía a Chapultepec con las avenidas de la capital italiana.
En 1530 se fundó la iglesia de Santa Maria de la Natividad de Aztacalco, que aún existe y define donde estaba el corazón de la Romita, situada entre las calles Puebla, Durango, Morelia y la actual Avenida Cuauhtémoc. El cura fray Pedro de Gante comenzó su acción evangelizadora bautizando en 1537 a los indígenas que «abrazaban» la nueva fe a base de imposición.
La tradición oral narra una historia que se funde con la leyenda, sobre los ladrones de la colonia de Tepito que eran ajusticiados durante el virreinato en la horca que se colgaba de los imponentes árboles ahuehuetes. Ya a finales del siglo XIX y principios del XX, cuando la Romita empezó a crecer convirtiéndose en la Roma, los ciudadanos representaban una fiesta cómica recordando a víctimas y verdugos. El pequeño núcleo de calles estrechas de la Romita fue rodeado por nuevas construcciones pero pervivió hasta la actualidad.
A principios del siglo XX fue la zona de poniente de la actual colonia la que recibió la denominación de la Roma, pero con el crecimiento del área, la Roma creció hacia el sur y paso a denominar Roma Norte y Roma Sur. Muchos palacetes y mansiones de gran belleza se alzaron para satisfacer la demanda de una clase alta pudiente. El estilo europeo con reminiscencias indígenas embelleció muchas calles que por desgracia tuvieron momentos de menos esplendor cuando las modas llevaron a esos propietarios a cambiar sus residencias en la segunda mitad de siglo. La decadencia se atajó con el nuevo milenio, con inversiones en lugares moda, restaurantes, tiendas chic o cafés boutique que volvieron a dar vida -aunque también encarecerlo- a la colonia Roma.
En la década de los 50 escritores referentes del movimiento beat como Burroughs, Ginsberg y Kerouac vivieron en la Roma y hoy podemos conocer los lugares que inspiraron a los iconos de este movimiento que regeneró la literatura norteamericana.
Los terremotos se han cebado especialmente con la Roma, cuyo subsuelo sufre en mayor medida las trepidaciones de los temblores. En 1985 el fatal terremoto dañó o destruyó muchas viviendas, y de nuevo en 2017 un nuevo seísmo volvió a afectar a la Roma. Pese a ello la Roma es una de las colonias más turísticas de Ciudad de México, y la vida no se para. Teatros, universidades, restaurantes chic y tiendas coquetas reciben al turismo que llega a la Roma.
Además es notoria la orientación y especialización en restaurantes de comida latinoamericana, especialmente argentina, peruana, colombiana, chilena o cubana, y la venta de productos de estos países en el mercado Medellín.
Qué ver y hacer en la Colonia Roma CDMX
La localización céntrica de la Roma hace que sea el punto ideal para vivir o alojarse durante un viaje, ya que desde aquí está al alcance lugares como Chapultepec, Polanco, la zona Rosa, la Condesa o incluso en centro histórico con el Zócalo, la Catedral y el Palacio de Bellas Artes.
La Roma es sobre todo famosa por sus bares, restaurantes, cervecerías, tiendas, cafeterías y pubs de copas, siendo uno de los centros de ocio de la capital de México. La avenida arbolada de Álvaro Obregón divide la Roma Norte y la Roma Sur, con un buen surtido de librerías, galerías de arte, restaurantes y locales animados.
Si paseamos por la Roma podemos descubrir rincones culturales donde hacer una compra especial, como en la increíble librería en la Condesa, una fascinante librería en la que si nos quedamos encerrados en el holocausto terrícola tendremos libros para toda la vida. Discos Mono es el contrapunto musical, facilitando que tras el revival del vinilo encontremos ese disco que no es casi imposible localizar.
En cuanto a la arquitectura de la época de Porfirio cuando se diseñó el urbanismo de la Roma, pese a los daños de los terremotos aún encontramos edificios que van desde el eclecticismo a villas de la Belle Époque y de estilo art nouveau o aunque en menor medida del art decó y de la arquitectura neocolonial.
Lugares destacados para visitar en la Roma
Como si dirigiera el tráfico, imitando a su hermana de Madrid, la Cibeles de la Roma en Avenida Oaxaca es uno de los monumentos más importantes de la Colonia Roma. Es una copia exacta de la estatua de la diosa -madre de Júpiter- que se encuentra en la capital de España y fue un regalo de la comunidad de residentes españoles al pueblo de México, colocada en la Roma en 1980.
Plaza Romita
Como señalábamos, el núcleo primigenio de la Roma era la plaza de la Romita, que conserva su plaza adoquinada, cubierta por árboles frondosos y la fuente circular que recuerdan ese aire sencillo colonial.
Santa María de la Natividad Aztacalco
La pequeña iglesia de Santa María de la Natividad Aztacalco es una de las iglesias más antiguas de Ciudad de México, edificada a principios del siglo XVII. El crucifijo del alta mayor es supuestamente uno de los cinco que envió personalmente el monarca español en el siglo XVI. Una de las imágenes religiosas del interior del templo, la de Señor del Buen Ahorcado era a la que obligaban a encomendarse a los indígenas colgados en la plaza de la Romita.
Espacios verdes en la Roma
En cuanto a lugares donde relajarnos dos buenas recomendaciones son el Parque canino del Jardín Alexander Pushkin a donde podemos acudir con nuestros amigos perros; y el Huerto Verde de la Roma, un espacio con aire hippy ubicado en un solar que quedó vacío tras la caída de varios edificios durante el terremoto del 85, y donde una asociación de voluntarios promueve un espacio sostenible, enseñando a los curiosos que pasan por allí como hacer un mundo mejor. Su huerto urbano es loable e impulsan actividades muy variadas de cariz ecológico.
Restaurantes – Dónde comer en la Roma
Hay muchas opciones y para todos los gustos en la Roma, desde lugares concurridos aptos para bolsillos que buscan locales baratos o económicos, a restaurantes más selectos donde los precios son más elevados. Algunos son verdaderas sorpresas por su ambiente o por sus propuestas gastronómicas innovadoras. Uno de los mejores es Parcela, donde el toque perfeccionista y fruto de una experimentación continua de su chef Alan Sanz es garantía de comer mejor que bien. El edén creado en el restaurante invita a conocer sus platos y de paso probar un buen mezcal de Oaxaca.
Otras opciones recomendables son restaurantes como Mia Domenicca con su repertorio de cocina mediterránea; Delirio, El Diez, Lampuga y Sobrino’s todos ellos en la Avenida Álvaro Obregón, Lucas Local con su interior curioso y cuyos platos son propuestas tan exóticas como su tabule de verdolagas y tzatziki; Alma Pura ideal para una parada vrede donde avituallarnos de zumos y smoothies que mezclan fruta y verdura;
Los mejores bares y pubs de La Roma
Antes de empezar a carburar y calentar motores para la noche tomar un café de cafetales mexicanos en Tierra Garat se hace necesario.
Si somos más nocturnos bares como Limantour, Aurora, Félix, Can Can Bar nos permitirán disfrutar de la noche en la Colonia Roma, o Café Curado que además de cafés y té se surte de cervezas artesanales. En el bar de la terraza del Hotel Casa Awolly, podemos degustar los cócteles que hacen homenaje al tigre.
Un lugar esencial para los gourmets de la buena cerveza artesanal es sin duda Malt Bunny, la Tienda de La Belga, o Morenos Tasting Room, donde además de probar las cervezas Morenos, hechas por los dueños, podemos degustar un abanico tan extenso como el que sale de sus 22 grifos.
La noche se puede continuar con alguno de los conciertos de música independiente que se celebran en el Multiforo Cultural Alicia localizado en la Romita.
Para terminar un propuesta de pulque con la la Pulquería Los Insurgentes, que pretende mostrar las bonanzas de esta bebida de origen indígena que puede acompañarse de algunos antojitos mexicanos.
Museos en la Roma Cdmx
Hay varias propuestas para una ruta cultural por la Roma, con museos y galerías que garantizan que el arte siempre esté presente. El más original, especial y sobre todo camaleónico es el MODO, el Museo del Objeto, cuyas exposiciones de objetos cotidianos rotan cada cuatro o seis meses, tocando temas como la Propaganda Electoral En México, Fútbol En México, La Vida Íntima De Los Objetos, La Lucha Libre, Las Relaciones Rotas o el Rock En México.
Otros museos que invitan a conocerlos son el Museo del Tatuaje, el Museo Histórico Judío y del Holocausto, el Museo Padre Pro y el Museo Bajio.
Edificios históricos en la Roma
La especulación inmobiliaria y los sendos terremotos han causado estragos en una histórica colonia donde estaban viviendas únicas. Hoy en día perviven algunas que al menos sirven de ejemplo para entender como era la Roma a principios del siglo XX. Uno es el Centro Cultural Casa Lamm, en las calles de Álvaro Obregón y Orizaba, un antiguo caserón reconvertido en galería, centro cultural y restaurante.
Enfrente de la Casa Lamm el Edificio Balmori de 1922 y reconstruido en 1991 -después de que el terremoto del 85 le afectara seriamente- tiene líneas de estilo afrancesado y toques eclécticos.
Entre las calles Orizaba y Puebla se encuentra la Iglesia de la Sagrada Familia (1910) obra del arquitecto Manuel Gorozpe, siguiendo un estilo que mezcla el neorrománico, neogótico y ecléctico. Otra iglesia es la de Nuestra Señora del Rosario en Avenida Cuauhtémoc, que emula la fachada de Notre Dame. Su construcción es previa a la ordenación que dio lugar a la Roma
En la Avenida Álvaro Obregón encontramos el Pasaje comercial El Parián, en cuyo interior encontramos tiendas y restaurantes de lujo. Hace siglos aquí se hallaba uno de los mercados coloniales, y por esta razón recibe el nombre de Parían que proviene de la colonia española de Filipinas, y donde se vendían productos asiáticos llegados al puerto de Acapulco por la Nao de la China.
El Edificio Río de Janeiro más conocido como la casa de las brujas por su curiosa forma del tejado o como dicen las leyendas por ser morada de la chamana Bárbara Guerrero, cuyos clientes eran figuras de la élite burguesa. En su inicio – época del porfiriato- eran departamentos de estética francesa de un piso, construidos por R. A. Pigeon en 1908. Las modificaciones de 1930 aportaron elementos de art déco en la fachada.
Escape Rooms
México no se ha resistido a la moda mundial de las salas de escape y en la Roma hay dos opciones de gran calidad como Enigma Rooms y Escape Rooms México.
Cómo llegar a la Colonia Roma
La Roma está bien conectada con transporte público, con paradas del Metrobús (líneas 1 y 3) como Nuevo León, Chilpancingo, Campeche, Sonora, Álvaro Obregón, Durango e Insurgentes de la línea 1; y Cuauhtémoc, Jardín Pushkin, Dr. Márquez, Hospital General y Centro Médico de la línea 3. Por otro lado el metro llega a través de la línea 1 con varias paradas: Cuauhtémoc, Insurgentes, Sevilla y Chapultepec; y de la línea 9: estaciones Chilpancingo y Centro Médico.